Con la tercera sesión de nuestro curso de cine llegamos a los años 70. Década irremediablemente marcada por la desaparición física de Franco, como muchos de vosotros apuntasteis. Muerte que se sitúa casi, casi en el centro de la década marcando poderosamente los años inminentemente anteriores y los posteriores.
Con respecto a los años precedentes conocimos un término que se usó para designar los años que van desde el final de los años 60 hasta la muerte de Franco: Tardofranquismo. Periodo convulso, con una sociedad que vislumbra el final de un régimen en descomposición pero aún manejando los resortes de la represión y la violencia.
Todos supimos ver que descomposición (moral), represión y violencia son los ejes fundamentales por los que transita Furtivos. Aunque estuvimos de acuerdo en que era una buena película, su visión evidentemente no es fácil por eso, para aligerar el sentimiento opresivo nos dejó oímos la canción España Camisa Blanca de mi Esperanza, que además nos sirvió para centrar el debate porque la poesía de Blas de Otero nos deja imágenes que de alguna forma u otra encontramos en Furtivos.
Estos son algunos de los elementos que se señalaron durante el debate:
- ‘Paloma buscando cielos más estrellados’
- ‘La pena deja plomo en las alas’
- ‘La muerte siempre presente nos acompaña en nuestras cosas más cotidianas’
- ‘Navaja, barro’
- ‘Nos dejó el hambre y se llevó el pan’
Y claro, el verso que no se le escapó a nadie:
- ‘A veces madre, siempre madrastra’
Martina = España
Ángel = El pueblo
Santiago = El poder civil
Milagros = La libertad
Se señaló la inconsistencia y estupidez de Santiago, el gobernador, y que a pesar de que ‘es tan tonto como parece’ (en palabras de Martina), es quien manda, hace y deshace como quiere, lo vemos siempre rodeado de secretarios, subsecretarios, directores y, sobre todo, de las fuerzas del orden. En definitiva, aunque cretino, maneja los resortes del poder.
Me resultó muy interesante que al comentar el carácter de Ángel, sus motivaciones, vacilaciones, deseos, etc., parecía que se estuviera hablando, no de un personaje, sino de las aspiraciones de la sociedad española previa a la muerte de Franco. La aspiración a la libertad centrada en el personaje de Milagros.
Y finalmente el personaje de Martina, la madre madrastra, castradora, que se resiste a cambiar, inmóvil en su bosque, devoradora de sus hijos, opresora: algunos relacionasteis la escena en que apalea a la loba con la foto de un policía antidisturbios que vimos en la presentación.
En definitiva esa España que nos pone ‘plomo en las alas’ y que se niega a progresar… pero que, como veremos en la próxima sesión, gracias a Ángel se vio obligada a cambiar y adaptarse a nuevos tiempos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario