sábado, 26 de marzo de 2011

El ángel exterminador

El jueves pasado comenzó el curso La vida es cine con el análisis de la película El ángel exterminador, de Luis Buñuel. Por fin pudimos compartir nuestras impresiones sobre una película tan inquietante. En el acogedor espacio de La Casa de Asturias en Bruselas, supimos resistir a la odisea de lo que ocurría en ese salón de una casa burguesa.

A todos nos interesó lo que nos contaba Buñuel, aunque temíamos las dificultades que planteba al espectador. Pero estábamos en un ambiente de buenos aficionados al cine.
Algunos hablasteis del carácter opresivo de la sociedad y de lo que representa el uso de la etiqueta y lo que puede ocurrir cuando se relajan las formas. Otros reflexionasteis sobre cómo nos comportamos en una situación de supervivencia. Hubo alguien que habló de la idea del sueñó y nos recordó la película Inception. Alguno de vosotros quiso profundizar sobre el universo de encantamiento que se produce con la película. Muchos pensasteis -como suponemos que Buñuel hizo en su época- que se debía leer también en clave política. Como el filme está lleno de símbolos, nos paramos un momento en el significado del oso: se habló de la mala conciencia de la sociedad, o del papel de la Bestia -con mayúsculas- que todos llevamos dentro.
Sin embargo, lo que más tiempo nos llevó fue la resolución: se descubrió por qué Nobile estaba encerrado con Leticia; para algunos la repetición de posiciones era una forma de recordar a todos que debían recuperar la etiqueta. Se habló del laberinto y del jardín de los senderos que se bifurcan de Borges o del jardín de los cerezos de Chejov. En definitiva, muchas referencias que enriquecieron el análisis de nuestra primera película.
Para finalizar vimos un fragmento de la película para televisión La cabina.

Presentación y análisis de la película



Os animamos a que volváis a ver la presentación y a que continués el diálogo a través del blog.

Porque estamos deseando seguir hablando de cine.

2 comentarios:

  1. 3 comentarios sobre las repeticiones:

    1)La película también me hizo pensar en el fenómeno de "ya visto" que los británicos particularmente adoran. Usted vive una situación y tiene la impresión de haberlo vivido ya sabiendo que no es el caso. Esto me llegó algunas veces, muy raramente. Es una sensación rara pero “oh” cuánto mágica.

    2)Sobre la repetición del discurso de Nóbile durante la comida. Buñuel completamente tiene razón. La misma declaración no tiene el mismo impacto, no provoca la misma reacción a los demás a 2 instantes diferentes. Es muy importante decir las cosas en el momento necesario. ¿No siempre fácil, no?

    3)De regreso de la ópera, el grupo de los burgueses sube una vez hacia la izquierda y una vez hacia la derecha (si recuerdo bien): esto me evoca las 2 películas concepto de Alain Resnais "Smoking" "No Smoking". Así como su nombre lo indica, en una de 2 películas, ciertos personajes fuman, en el otro, no. No obstante, esto no es el más importante. La principal característica de estas 2 películas es que prácticamente se ve de nuevo las mismas escenas a una excepción cerca cuando el realizador plantea esta cuestión: "¿cómo habría reaccionado este personaje si otro personaje hubiera tenido otra declaración?", lo que da entonces una escena diferente. Sólo 2 actores desempeñan todos los papeles en esta obra rodada a manera de una pieza de teatro, en modo escenas/sketches. Es naturalmente especial pero adoré estas 2 películas, vistas desde su salida en 1993 a la cinemateca de mi ciudad natal que proponía películas otras que los “blockbusters” del cine de la ciudad ¡y lo que es más en versión original para las películas extranjeras! Vi de nuevo estas 2 películas sólo una otra vez más. Pues, voy a apresurarme verlas de nuevo. Vivamente le animo a verlos si no las conocéis.

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  2. Muchas gracias, Odile, por todas las referencias que nos das sobre tus impresiones sobre la repetición.
    Algunos críticos han hablado de que las repeticiones son para Buñuel la ley del mundo, una forma de socializar el instinto de muerte que se impone en nuestra civilización. Las repeticiones nos sacan del tiempo histórico y hacen referencia a un tiempo mítico: "el tiempo del hombre arcaico, que anida bajo las blancas pecheras del grupo de invitados burgueses, protagonistas del encierro de la película." (Víctor Fuentes, "Buñuel en México").

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